CRÍTICA. Bifobia

''Si naces con vulva, eres mujer y te tienen que gustar los hombres; y si tienes pene, tienes que ser hombre y te gustan las mujeres. ''

A todos nos lo han asignado así nada más nacer. Hoy en día denominados personas ''LGTB+'' a quienes no cumplen esa afirmación. Pero, ¿sabéis desde cuando existen las personas LGTB? Fácil, desde que existe el ser humano. Existen evidencias prehistóricas de personas homosexuales. Por ejemplo, en la Antigua Grecia no existían las etiquetas, se daba por hecho que podía haber atracción por ambos sexos (por varones, como siempre el papel de la mujer queda secundario en la historia y no se les permitía) Aunque sí sabemos de Safo de Mitilene, poetisa griega que vivió en la isla de Lesbos, que exponía en sus líneas su amor por otras mujeres. Pero todo se tuerce con la entrada del cristianismo, se comienza a dar forma al pensamiento homofóbico y empiezan las persecuciones y discriminaciones. Este pensamiento arraigó en muchas culturas, todo acto no pensado para la reproducción se consideraba anti-natura y se le acompañaba de enfermedades y sequias. 

Por suerte, con el paso de los años, con sacrificio, esfuerzo y visibilidad, a día de hoy (poco a poco) volvemos a tener más conciencia de la diversidad. Mi critica semanal de hoy trata sobre la bifobia, y el largo camino que todavía nos queda por recorrer. 

La bifobia es esa actitud desfavorable hacia las personas que sienten atracción sexual y/o romántica por personas de ambos sexos. Es decir, creencias negativas sobre las personas bisexuales. Si echamos la vista atrás hace unos años, podemos comprobar una conciencia general de respeto ante lesbianas y gais. Pero a su vez, se ha arraigado un pensamiento dicotómico que parece inseparable: todo es blanco o negro, o eres heterosexual o eres lesbiana.  Parece ser que no hay sitio para el gris ni los bisexuales. 

''Es una etapa'', ''¿quieres un trio?'', ''estás confusa/o'', ''asume tú homosexualidad'' NO. 

Pensar en la imposibilidad de que te gusten hombres y mujeres por igual cierra una puerta a tus verdaderos sentimientos y sí podría ocasionar lo que comúnmente se conoce como ''encerrarse en el armario''. No es una fase ni una moda, no eres más promiscuo/a por ello. 

La sexualidad es algo personal e intimo, pero todos debemos tener los mismos derechos. Igualdad y respeto, por favor. Dejemos de creen en mitos, comencemos a naturalizar la bisexualidad, defiende tú existencia ante los demás y niega los tópicos cuando los escuches.

Ya es complicado ser diferente, por eso está en nuestras manos poner ese granito para fomentar el cambio. Quítate la venda, quiere sin miedo y acéptate como eres. 

                               Fuente: elaboración propia